lunes, 21 de junio de 2010

Mecánica de reflexión

Ya está apoyado sobre dos estructuras de ladrillo improvisadas. Creo que esa limpieza de bajos que le he hecho en la gasolinera es lo mejor que se me ha podido ocurrir. Al meterme debajo es un alivio no tener una intratable capa de barro y polvo entre mis manos y las piezas.
Esperaba encontrarme un cubrecárter pero no, todo al aire. No puedo evitar reírme. Es como una mujer vestida con falda pero sin ropa interior. No empecemos con similitudes, que voy a tener que pasar aquí debajo un buen rato y no me parezco en nada a un ginecólogo. La correa ya está desmontada y tengo la bomba de dirección proveniente de un desguace a un lado, lista para reemplazar a la original, que ya está demasiado gastada.
Para gastado yo. Al fin empieza el verano. Harto de exámenes y de Ferrol. Esa cuidad no es para mí. Físicamente cerca de casi todo lo que tenga que ver conmigo, pero al mismo tiempo tan lejos de todo lo que pienso. Desearía no tener que estudiar o trabajar en ninguna parte, o en cualquier lugar al mismo tiempo. Antes de seguir dándole vueltas a esto mejor echarle la culpa a Ferrol. Posiblemente sea la causa y consecuencia de todo lo que haya hecho mal recientemente. Da igual, ahora estoy lejos. No demasiado, pero lejos. Este año ha sido algo más nutrido que el pasado, aunque poco menos deprimente. Incluso he llegado a contentarme con todo lo que estaba haciendo, aunque fuera por poco tiempo. Es necesario que pase tiempo allí, me prepara para todo. Pero si todo va a ser así prefiero buscarme la vida de otra forma. Me deprime. Me quita las ganas hasta de hablar. Es el lugar donde nunca intentaré ligar, no vaya a ser que ella sea de Ferrol y tenga que ir más veces. Ni con esas creo que fuese a conseguir tenerle cariño a esa ciudad. Ni el mejor beso lo conseguiría.
Besos, un tema interesante. ¿Que es un buen beso? Sinceramente creo que cada uno tiene su ritmo y sus maneras, fruto de la imaginación y la experiencia. Hay besos suaves, besos fuertes, con mayor "rotación", más húmedos, más secos, más de lengua, más de labios, más de dientes, más ruidosos, más discretos, más de "dejarse las cervicales, más sosegados, más de "que te como", auténticos mordiscos (igual de eficaces pero algo más dolorosos)... todo un repertorio. Al final todo empieza con un "beso estándar" que sirve de "a ver que es lo que le gusta", o "¿empezaré yo?". Tonterías, al menos yo nunca me he puesto a pensar todo esto al empezar a besar, aunque si después de un rato, pero así de raro soy.
Siguiendo con la tarea, supongo que tocaría vaciar el circuito hidráulico de la dirección, pero como no tengo ni idea de si hay un tornillo específico para eso, desenchufo directamente uno de los tubos que tiene conectados la bomba y dejo caer el aceite en una garrafa de agua vacía (evidentemente). Al hacerlo me manché un poco los dedos con el aceite. ¿Y que? ¿A alguien le importa? Me han dicho que use guantes, pero bastante hay que aguantar ya con los condones. El tacto es importante, y aqui no hay riesgo de tener hijos ni enfermedades de transmisión sexual. Yo creo que los que están en contra del uso de los preservativos, aunque no lo digan, lo hacen por tacto y no por ideas. Siendo así estoy de acuerdo.
He desconectado ya todo y estoy quitando el último tornillo para retirar la pieza. Empiezo a colocar la nueva. Sencillamente prefiero estar aquí ahora mismo que por ahí con la gente. Hay veces que es mejor estar solo. Ahora mismo no me apetece hablar. Me imagino la voz de una chica: "¿te lo pasas mejor con el coche que conmigo?". La respuesta es no, pero visto el historial, él aguanta más tiempo conmigo, asique hay que cuidarlo. Al menos a él no le dejo la posibilidad de largarse y dejarme tirado.

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